Una vez tenemos el informe de detección y se lo hemos comunicado a nuestro peque, como hemos comentado en posts anteriores, llega el momento de pensar cómo queremos acompañar a nuestros hijos e hijas y cómo ayudarles a crecer de manera integral alimentando ese potencial ya detectado. Sobre este tema reflexiona Mónica Cerrada, psicóloga, madre de dos peques con altas capacidades y especializada en este tema. Puedes contactar con ella en PsicoEducaOn@gmail.com
La importancia de informarse y asociarse
Animamos a las familias a formarse e informarse, acudiendo a asociaciones como AMACI o a expertos que nos pongan en contacto con otras familias y niños/as con ACI, alentar la diferencia, enriquecer su entorno y acompañar su mundo emocional.
La importancia de un estilo educativo democrático
Es importante, a este respecto, hacer en primer lugar una autoevaluación de nuestro estilo de crianza, ¿en qué parte de las coordenadas nos situamos como figuras de referencia de nuestros hijos e hijas? En esta reflexión sería interesante ser lo más honestos posibles y dedicar un tiempo a visualizarnos en diferentes situaciones a lo largo de nuestros años de crianza.
Una vez hecha dicha reflexión, sería interesante pensar en acompañar a nuestros hijos e hijas con altas capacidades intelectuales desde un estilo democrático en el que se sientan acompañados en sus necesidades y con límites respetuosos que les ofrezcan seguridad.
Para ello, deben sentir que sus adultos de referencia se muestran responsables, accesibles, presentes, receptivos, proactivos y que establecen límites con amor.
En este sentido, cuanta más autoridad otorgada nos confieran nuestros hijos/as y menos autoridad coercitiva o impuesta ejerzamos, más fácil será consensuar normas, límites y llegar a acuerdos enfocados en soluciones y no en coerciones y/o premios/castigos.
Recordemos que, además, nuestros hijos/as suelen tener un alto sentido de la justicia y tenderán a cuestionar las imposiciones.
10 claves para acompañar a nuestros hijos e hijas de forma positiva
1. Centrarnos en buscar las fortalezas que poseen y los aspectos positivos de sus comportamientos nos ayudará a conectar con ellos/as en nuestro día a día y a fortalecer nuestros lazos afectivos.
2. Diferenciar entre sus conductas y lo que son, el hecho de que tengan comportamientos inadecuados no los hace malos. Nuestra principal misión está en aceptarlos de manera incondicional, es decir, tal y como son.
3. Alentar su diferencia, destacando todas las fortalezas que, haciéndole diferente, son parte de su singularidad.
4. Debemos, asimismo, favorecer y nutrir tanto su creatividad como su pensamiento divergente, proporcionando un ambiente preparado enriquecido en el que pueda explorar libremente. Por ello, es muy importante que seamos capaces de observar y darnos cuenta de cuáles son sus intereses y necesidades.
5. También es importante que se sientan capaces y colaboren, en función de su edad, en el día a día de la dinámica familiar, hay que fomentar su responsabilidad desde lo cotidiano.
6. Sin duda, uno de los apoyos que necesitan es identificar, gestionar, expresar y regular sus emociones y para ello será importante que nosotros mismos seamos ejemplo de lo que queremos modelar, al tiempo que conocemos e identificamos las distintas emociones en nosotros mismos y los demás.
7. Es importante subrayar la necesidad de encontrar un equilibrio saludable entre las responsabilidades, actividades curriculares, extraescolares y el juego libre no estructurado, tan necesario para el neurodesarrollo infantil.
8. Con la parte escolar, podemos apoyar buscando una buena fuente de recursos o neurotécnicas de estudio como las que nos ofrece VÍCTOR MIÑANA, y que de forma recurrente imparte para AMACI, que ayude a estructurar y ordenar su prolija producción de ideas y organizar sus tareas, ofreciendo herramientas de autorregulación del aprendizaje.
9. Si aun con estas recomendaciones nos sentimos perdidos o sobrepasados es importante que busquemos ayuda en profesionales que nos asesoren en nuestra crianza con herramientas adecuadas a los desafíos que encontramos.
10. También es importante acudir a Asociaciones como AMACI para encontrar tribu que apoye nuestras inquietudes, que comprenda nuestras experiencias, que nos tienda una mano en la labor de acompañar las necesidades específicas de nuestros hijos e hijas con altas capacidades intelectuales. Un espacio libre de juicios y con experiencias parecidas a las nuestras que pueden aliviar nuestra carga y encontrar soluciones a nuestros desafíos cotidianos. Un espacio donde niños y niñas se sentirán identificados entre sí y podrán sentirse seguros y tranquilos en su diferencia. Un espacio de colaboración y apoyo mutuo.
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